La obligatoriedad de implantar canales de denuncias internos en las empresas está cada vez más cerca. España deberá trasladar la Directiva de protección de denunciantes a su normativa interna en los próximos dos meses si no quiere que Bruselas acuda a los Tribunales.
Novedades sobre los Canales de Denuncias Internos
La Comisión Europea, mediante un dictamen motivado emitido en el mes de julio, ha concedido a España un último plazo de 2 meses para cumplir con la Directiva de Protección de Denunciantes. Si trascurrido este tiempo el Estado español no transpone la Directiva, la Comisión podrá agotar el procedimiento de infracción iniciado en febrero de 2022 y elevar el caso al Tribunal de Justicia de la Unión Europea.
Esta nueva Directiva obliga a las empresas de más de 50 empleados a disponer de canales de denuncias internos y a salvaguardar a las personas que comuniquen conductas irregulares, garantizando su protección frente a cualquier represalia.
Los estados europeos debían haber trasladado esta Directiva a las legislaciones internas en diciembre de 2019, pero su inacción llevó a Bruselas a expedientar a España junto con otros 23 países, dando ahora un ultimátum a quince de ellos.
Empieza así la recta final para que el anteproyecto de Ley reguladora de la protección de las personas que informen sobre infracciones normativas y de lucha contra la corrupción, aprobado por el Consejo de Ministros el 4 de marzo de 2022, se pueda ultimar y llevar a las Cámaras para su aprobación. Sobre el citado anteproyecto ya constan emitidos el Informe del Consejo General del Poder Judicial y el Dictamen Consejo Económico y Social.
Las empresas y entes públicos, obligados a disponer de estos canales de denuncias, deberán adaptarse lo antes posible a las exigencias de esta norma comunitaria, para no incurrir en infracciones una vez quede aprobada la norma española de protección de denunciantes. Acompasar la implantación de una herramienta o portal para denunciar con un procedimiento para gestionar las denuncias y un Programa de Compliance, que contemple a mayores de este tipo de medidas detectivas, otras medidas preventivas y correctivas de irregularidades, se ha vuelto esencial para las empresas. En un entorno regulatorio cada vez más exigente, optar por estos programas de cumplimiento será siempre la opción más acertada.